1. Estructura y funciones de las glándulas del sistema endocrino: hipotálamo, hipófisis, tiroides, paratiroides, páncreas endocrino, suprarrenales, testículos y ovarios.

1.5. Testículos y Ovarios

Los testículos

Testículos

Los hombres tienen glándulas reproductivas gemelas, llamadas testículos, que producen la hormona testosterona. La testosterona ayuda a que el niño varón se desarrolle y mantenga sus características sexuales. Durante la pubertad, la testosterona ayuda a producir los cambios físicos que hacen que el niño se convierta en un hombre adulto, tales como el crecimiento del pene y los testículos, el crecimiento del vello facial y púbico, el engrosamiento de la voz, el aumento de masa muscular y fuerza, y el aumento de tamaño. Durante la vida adulta, la testosterona ayuda a mantener el vigor sexual, la producción de espermatozoides, el crecimiento del cabello, y la masa muscular y ósea.

El cáncer testicular, que es el cáncer más común en varones de 15 a 35 años, puede ser tratado por la extirpación de uno o ambos testículos. La reducción o falta de testosterona puede causar una disminución del impulso sexual, impotencia, una imagen alterada del cuerpo y otros síntomas.

Los ovarios

Ovarios

Las dos hormonas femeninas más importantes producidas por las glándulas reproductivas gemelas, los ovarios, son el estrógeno y la progesterona. Estas hormonas son las responsables de desarrollar y mantener las características sexuales femeninas y de mantener el embarazo. Junto con las gonadotropinas pituitarias (FH y LSH), también controlan el ciclo menstrual. Los ovarios también producen inhibina, una proteína que inhibe la liberación de la hormona estimuladora de folículos producida por la pituitaria anterior y ayuda a controlar el desarrollo de los óvulos.

El cambio más común en las hormonas ovarianas ocurre con el inicio de la menopausia que es parte del proceso natural de envejecimiento. También puede ocurrir cuando los ovarios se extirpan quirúrgicamente. La pérdida de función ovariana significa la pérdida de estrógeno, lo cual puede producir sofocos, adelgazamiento del tejido vaginal, suspensión de la menstruación, cambios de estado de ánimo y pérdida ósea u osteoporosis.

Una condición llamada síndrome de ovario poliquístico (PCOS) es causada por la producción excesiva de hormonas masculinas en las mujeres. El síndrome PCOS puede afectar los ciclos menstruales, la fertilidad y los niveles hormonales, y puede causar acne, crecimiento de vello facial y calvicie de configuración masculina.