3. Fundación de la Orquesta Sinfónica Nacional.

A poco de fundarse el Conservatorio Nacional de Música, en 1907, se organizaron en su seno conjuntos orquestales como el que dirigió por varios años el maestro Pietro Bruno.

En 1940 el compositor y director de orquesta José María Velasco Maidana, retornado de Alemania el año anterior, conformó la Orquesta Nacional de Conciertos con la que estrenó su ballet Amerindia.

Este grupo fue la semilla de la Orquesta Sinfónica Nacional, creada mediante el Decreto Supremo No. 297 del 6 de abril de 1945 dictado por el presidente Gualberto Villarroel a iniciativa de Mario Estenssoro.

Erich Eisner, vienés que por entonces trabajaba en Sucre en la organización de la sección Musical de la Escuela Normal, fue su primer Director titular.

Maestros bolivianos y extranjeros dirigieron de manera titular la Sinfónica Nacional en sus 55 años de existencia: Jaime Mendoza Nava, Antonio Montes Calderón, Leonard Atherton (británico), Gerald Brown (norteamericano), Rubén Vartanyan (ruso), Carlos Rosso, Mario Perusso (argentino), Fredy Céspedes, Ramiro Soriano y Freddy Terrazas.


El actual director titular David Händel (norteamericano) está llevando adelante un ambicioso programa de profesionalización de la Sinfónica. Paralelamente a la actividad desarrollada dentro de la Orquesta Sinfónica Nacional de Bolivia, es asesor Artístico de la Orquesta Sinfónica del país de Guatemala.

Su labor de difusión cultural no se realizó sólo en La Paz u otras ciudades del eje troncal. En años recientes la Orquesta se presentó en las capitales de los nueve departamentos del país y en muchas poblaciones menores.

Desde 1999 la Orquesta Sinfónica Nacional realizó un ciclo de conciertos con reconocidos cantantes de la música popular boliviana. Estas presentaciones fueron grabadas para la edición de una serie de discos compactos denominados: "Estrellas Populares de Bolivia". El primer volumen ya se encuentra a la venta.

En el Festival Internacional de la Cultura de Sucre-Potosí 2001, la Orquesta dio un concierto inolvidable en el incomporable salar de Uyuni, donde interpretó la 5ta Sinfonía de Beethoven y varias piezas musicales del acervo musical boliviano. 
El singular espectáculo, que atrajo a miles de visitantes del país y de Chile, fue declarado el evento de turismo más importante del año.