CUIDADO DEL MEDIO AMBIENTE COMUNITARIO

4. Manejo adecuado y disposición de los residuos. Saneamiento básico

Saneamiento

La calidad del ambiente en donde habitan las personas afectadas por el desastre juega un papel crucial en su estado de salud. Las principales acciones para evitar un deterioro mayor, y más bien procurar el mejoramiento gradual de este hábitat, son:

a. Disposición apropiada de excretas y aguas residuales: Para evitar la contaminación del suelo y las fuentes de agua, así como la proliferación de fauna indeseable es urgente establecer métodos sanitariamente controlados para la eliminación de las excretas y de las aguas usadas. El método elegido para una zona o región determinada dependerá de muchos factores, entre ellos, de la geología y la hidrogeología locales, la cultura y las preferencias de las comunidades, los materiales disponibles localmente y el costo.

  • En caso de no disponer de servicios sanitarios, es necesario construir letrinas (individuales, colectivas, portátiles), tomando en cuenta las características del lugar, tales como tipo de suelo, condiciones topográficas y la accesibilidad de los usuarios, así como la presencia de aguas superficiales y subterráneas en las cercanías.
  • Si el terreno no es adecuado para construir letrinas (suelo rocoso o napa freática alta), es imprescindible habilitar letrinas elevadas (sobre el terreno natural) con depósitos intercambiables. Hay que trasladar las excretas a un pozo ubicado en terreno apropiado, donde se deben enterrar inmediatamente.
  • Evitar la implementación de tecnologías sofisticadas que pueden ser poco sostenibles.
  • Información e instruir a la población sobre utilización adecuada de las letrinas, ya que no todas las personas están familiarizadas con su uso, lavado de manos y mantenimiento de la higiene de la letrina y alrededores, entre otros.

Otra fuente potencial de contaminación son las aguas residuales de uso doméstico, de instalaciones médicas, y otros líquidos estancados incluyendo las aguas de lluvia e inundación. Por eso se debe trabajar en coordinación con la población, en la canalización y eliminación de estas guas, principalmente en los puntos de abastecimiento de agua segura y en general en todas las zonas de actividad y asentamientos humanos.


b. Disposición apropiada de desechos sólidos Los residuos sólidos resultan de una combinación de basuras domésticas, cadáveres de animales, y otra serie de residuos cuya acumulación incide directamente en la aparición y propagación de enfermedades transmitidas por vectores. Las características, el volumen, composición y disposición de estos desechos cambian como consecuencia de los desastres. Incluso, los empaques utilizados para entregar asistencia a los damnificados pueden llegar a aumentar significativamente la cantidad de desechos sólidos en una comunidad. En caso de terremoto por ejemplo, debido a la gran cantidad que se genera, se requiere de un tratamiento específico para el manejo de escombros y restos de demolición.


La magnitud de las tareas a realizar, implica la participación de un grupo diverso de entes responsables organizados para el manejo de residuos sólidos en situaciones de desastre. Algunas de las acciones urgentes que hay que atender es este campo son:

  • Organizar las tareas de recolección y transporte de los desechos
  • Establecer procedimientos para el manejo de residuos domésticos dotando a la población de elementos para la recolección de su basura así como instrucciones para el manejo adecuado, enfatizando en la importancia de evitar el desecho indiscriminado de la basura.
  • Prestar especial atención al manejo de residuos sólidos peligrosos incluyendo los residuos provenientes de servicios de atención de salud
  • Establecer procedimientos para el tratamiento y disposición final de los desechos

c. Vigilancia de la inocuidad de los alimentos: La inocuidad de los alimentos implica acciones encaminadas a garantizar la máxima seguridad posible para evitar las enfermedades que pueden ser transmitidas por los alimentos en mal estado o mal procesados; por eso los esfuerzos de vigilancia deben abarcar toda la cadena alimenticia, desde el origen hasta al consumo. Estas tareas se llevan a cabo principalmente los sitios de alojamiento temporal en donde se puede tener un mejor control:

  • Recepción: se debe verificar la calidad de los productos alimenticios que se reciben, desde el estado de conservación hasta las fechas de vencimiento, según sea el caso.
  • Almacenamiento: establecer medidas estrictas de higiene en el proceso de almacenamiento, incluyendo las tareas de verificación continua de su estado en el depósito.
  • Preparación: establecer estrictas medidas sanitarias para el proceso de preparación, incluyendo las condiciones sanitarias del sitio, los utensilios que se utilizan y la higiene de las personas que participan en la preparación.
  • Consumo: se debe ejercer vigilancia y sensibilizar a las personas sobre los hábitos de higiene en el consumen los alimentos y los utensilios que utilizan.

d. Disposición de animales muertos: Aunque se considera que en la mayoría de los casos los cadáveres de animales constituyen un riesgo para la salud pública sólo bajo condiciones específicas, es necesario establecer medidas para la disposición correcta de sus restos, sin que esto constituya una prioridad por encima de los otros temas de saneamiento. 

e. Control de vectores y roedores: El deterioro de las condiciones ambientales facilita la proliferación de vectores responsables de la transmisión de enfermedades, por lo que se deben aplicar medidas sencillas para mantener estos vectores en un nivel lo suficientemente bajo para prevenir riesgos sobre la salud humana; entre otras:

  • Educación y concienciación pública para eliminar criaderos de vectores en las viviendas y alrededores, y sobre las medidas para evitar las infecciones, incluida la higiene personal;
  • Identificación activa y eliminación de sitios de reproducción de vectores, incluyendo la eliminación sanitaria de los desechos
  • Fumigación de interiores y exteriores con insecticidas de efecto residual
  • Brindar a la población medios para protegerse de los vectores de enfermedades, así como instrucciones para su control y eliminación.
  • Extremar medidas sanitarias en los lugares de aglomeración de personas, tales como los centros de alojamiento temporal
Fomento de la higiene: Debe ponerse énfasis en las acciones que la comunidad misma debe poner práctica para reducir el deterioro ambiental y prevenir la aparición de enfermedades relacionadas con malas condiciones sanitarias. Para esto, debe recibir una combinación de conocimientos, prácticas y recursos para evitar comportamientos peligrosos en materia de higiene. El fomento de la higiene abarca todos los temas del saneamiento y constituye un pilar básico de la lucha integral por lograr un pronto mejoramiento del entorno. para esto es muy crucial un buen conocimiento de las prácticas culturales y un buen uso de todos los medios de comunicación disponibles.