LOS SERES VIVOS Y SUS NIVELES DE ORGANIZACIÓN EN LA MADRE TIERRA

4. Teoría celular: La célula como unidad de todo ser vivo.

La teoría celular es la parte fundamental y mas relevante de la bilogía que explica la constitución de la materia viva a base de células y el papel que tiene estas células en la constitución de la materia viva. A la teoría celular se llego gracias a un a serie de avances científicos que fueron ligados a la mejora de la calidad de los microscopios. En 1665, el científico inglés, Robert Hooke, examinado una laminilla de corcho al microscopio, observo que estaba formada por pequeñas cavidades poliédricas a las que denomino células, se le considera como el descubridor de la célula.


Lamina de Corcho descrita en la Micrographia de Robet Hooke

Antony Van Leeuwenhoek (1632-1723), contemporáneo de Hooke, realizo detalladas observaciones de las células animales y vegetales e incluso descubrió el mundo de los microorganismos, protozoos y bacterias, utilizando un microscopio simple de una sola lente construido por él.

Pero hasta que no se dispuso de buenos microscopios ópticos, a principios del sigo XIX, no se descubrió que todos los seres vivos, tanto animales como vegetales, están formados por células. Este principio es el que desarrolla la teoría celular que se atribuye al botánico Matthias Schleiden (1838) y al zoólogo Theodor Schwann (1839). De acuerdo con la teoría celular, podemos concluir que: la célula es la unidad estructural y funcional de los seres vivos, de manera que la actividad vital de estos es el resultado de la suma de las actividades de todas sus células, entre las cuales existe una coordinación.

En 1858, Virchow completo la teoría celular con su celebre principio omnis cellula e cellula, es decir, toda célula proviene de otra célula.

En 1889, August Weismann amplio la información de Virchow desde un punto de vista evolutivo resaltando que hay una continuidad interrumpida entre las células actuales (y los organismos que ellas componen) y las células primitivas que aparecieron por primera vez sobre la tierra hace 3500 millones de años. La prueba del origen común de todas las células actuales reside en la semejanza de su composición y de sus estructuras.

La teoría celular fue debatida a lo largo del siglo XIX, pero fue Pasteur el que, sus experimentos sobre la multiplicación de los microorganismos unicelulares, dio lugar a su aceptación rotunda y definitiva.

Santiago Ramón y Cajal logro unificar todos los tejidos del cuerpo en la teoría celular, al demostrar que el tejido nervioso está formado por células. Su teoría, denominada “neuronismo” o “doctrina de la neurona”, explicaba el sistema nervioso como un conglomerado de unidades independientes. Pudo demostrarlo gracias a las técnicas de tinción de su contemporáneo Camillo Golgi, quien perfecciono la observación de células mediante el empleo de nitrato de plata, logrando identificar una de las células nerviosas. Cajal y Golgi recibieron por ello el premio Nobel en 1906.

El concepto moderno de la Teoría Celular se puede resumir en los siguientes principios:

·         Todos los serves vivos están formados por células o por sus productos de secreción. La célula es la unidad estructural de la materia viva, y una célula puede ser suficiente para constituir un organismo.

·         Las funciones vitales de los organismos ocurren dentro de las células, o en su entorno inmediato, controladas por sustancias que ellas secretan. Cada célula es un sistema abierto, que intercambia materia y energía con su medio. En una célula caben todas las funciones vitales, de manera que basta una célula para tener un ser vivo (que será un ser vivo unicelular). Así pues, la célula es la unidad fisiológica de la vida.

·         Todas las células proceden de células preexistentes, por división de estas (Omnis cellula ex cellula). Es la unidad de origen de todos los seres vivos.

·         Cada célula contiene toda la información hereditaria necesaria para el control de su propio ciclo y del desarrollo y el funcionamiento de un organismo de su especie, así como para la trasmisión de esa información a la siguiente generación celular. Así que la célula también es la unidad genética.