LITERATURA

3. Lectura: “El corazón de las tinieblas” de Joseph Conrad

Joseph Conrad escribió esta novela basada en su experiencia en el Congo. Este clásico habla de la lucha del hombre contra los elementos naturales, si bien ha servido y sirve para criticar la amarga historia de un pueblo sometido a los excesos y privilegios de la colonización. 
El corazón de las tinieblas, publicado en 1902, trasciende la circunstancia histórica y social para convertirse en una exploración de las raíces de lo humano, esas catacumbas del ser donde anida una vocación de irracionalidad destructiva que el progreso y la civilización consiguen atenuar pero nunca erradicar del todo.

Quizá la mejor introducción a El corazón de las tinieblas sea el escueto comentario que el propio Conrad hizo tras su viaje al Congo en 1890: Antes del Congo yo era un solo un simple animal. Aquel viaje que sin duda representó para él un descenso a los infiernos, es el que nos cuenta por boca de Marlow, su alter ego, con un relato estremecedor en el que las fueras elementales de la Naturaleza hallan su contrapartida en las fuerzas oscuras y primitivas que actúan en el interior del hombre.
En este relato, de una rara y subyugadora perfección estilística, Conrad parece que alcanza su objetivo como escritor: nos hace oír, sentir y ver por medio del poder de la palabra escrita.
El corazón de las tinieblas es una de las historias más conocidas de Conrad, y en ella se basaría Francis Ford Coppola para filmar Apocalypse Now.

El autor

Nacido como Józep Teodor Konrad Korzeniowski, en Berdyczów (antigua Polonia, hoy Ucrania), Joseph Conrad fue un escritor atípico. Desarrolló su talento a una edad bastante tardía y escribió toda su producción literaria en inglés, lengua que aprendió leyendo a Shakespeare.

Huérfano desde los 12 años, Conrad abandonó los estudios para marcharse a Marsella, donde se enroló como marinero. Sólo se sabe que viajó por el Caribe, trabajó como traficante de armas y estuvo a punto de suicidarse por amor. Poco más.


Con el fin de escapar del servicio militar obligatorio, emigró a Inglaterra, donde continuó su labor como marinero en los años del apogeo del Imperio colonial inglés. Como tal acabo nacionalizándose, lo que le permitió alcanzar el rango de capitán de la marina mercante británica. Todas esas horas a bordo de barcos, las relaciones que sostuvo y las cosas que vio forman el pensamiento de Joseph Conrad, el cual se traslada a sus obras: Lord Jim, Nostromo, Con la soga al cuello, etc. Una filosofía que explota como pocas la vulnerabilidad moral del ser humano y en la que, bajo un profundo pesimismo, observamos la cruel lucha existente entre el individuo y el mundo que le rodea.

Se trata de un escritor al que cuesta clasificar, quizá por esa mezcla de realismo y romanticismo que desarrolló, o bien porque escribió su obra en un idioma distinto de su lengua natal, lo que le dio un uso singular del inglés. Considerado como uno de los principales escritores premodernistas, se entretejen en sus libros temas recurrentes como la soledad, el mar, la aventura y el vacío ético del ser humano.

Autor de reconocido éxito, se relacionó en vida con figuras de la talla de Bertrand Russell, H. G. Wells, Henry James o Rudyard Kipling. A su afición al juego, que le causó graves problemas económicos, hubo que sumar sus continuas caídas en la depresión, y al final de su vida, su mala salud. Moriría de un ataque al corazón el 3 de agosto de 1924 en Bishopbourne, Inglaterra, poco después de rechazar el título nobiliario que la corona le ofreció.

Hoy, el cuerpo de Conrad reposa en el cementerio de Canterbury, donde su lápida reza:

“El sueño tras el esfuerzo, tras la tempestad el puerto, el reposo tras la guerra y la muerte tras la vida, harto complacen”


Libro "El corazón de las tinieblas" Fuente: http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx/Colecciones/ObrasClasicas/_docs/CorazonTinieblas_Conrad.pdf