ALIMENTOS Y NUTRIENTES QUE REQUIEREN LOS SERES VIVOS

5. Trastornos de la conducta alimentaria: anorexia y bulimia.

Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA)

Los TCA son trastornos mentales caracterizados por un comportamiento patológico frente a la ingesta alimentaria y una obsesión por el control de peso. Son trastornos de origen multifactorial, originados por la interacción de diferentes causas de origen biológico, psicológico, familiar y sociocultural. Son enfermedades que provocan consecuencias negativas tanto para la salud física como mental de la persona.

Los TCA más conocidos son la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa, pero también existen otros, como el trastorno por atracón, la ortorexia (la obsesión por la comida sana) y la vigorexia (la obsesión por el ejercicio físico).


Los TCA son enfermedades graves pero se pueden curar si la persona hace tratamiento con un equipo de médicos y psicólogos especializados en TCA. Son tratamientos largos y complejos. Un rasgo habitual de estos trastornos es la falta de conciencia de enfermedad por parte de la persona afectada. Esto quiere decir que la persona afectada no es capaz de identificar las consecuencias negativas del trastorno , ni de la necesidad de hacer tratamiento, ni tampoco los beneficios de este. Este hecho dificulta la adherencia al tratamiento en algunos casos. Si esto, el papel de la familia es especialmente importante para intentar que la persona afectada reciba el tratamiento que necesita aunque no colabore en recibirlo.

¿Qué es la Anorexia Nerviosa?

Las personas que padecen anorexia nerviosa sienten un miedo intenso a aumentar de peso o engordar, y están excesivamente preocupadas por su silueta. Como consecuencia, presentan conductas anómalas en cuanto a la alimentación, el peso y el volumen y la silueta corporales. La persona puede verse gorda o desproporcionada, a pesar de tener un peso por debajo de lo considerado normal.

Sufrir este trastorno tiene un gran impacto negativo en la vida familiar, social, laboral, académico y emocional. Al inicio de la enfermedad es posible que no se observen excesivos problemas. Incluso es posible que los afectados se sientan satisfechos con la pérdida de peso, ya menudo se ven recompensados por su entorno. Pero al cabo de un tiempo aparecen los síntomas que indican que algo no funciona. Hay que estar alerta ante determinados tipos de comportamiento o signos que pueden hacer sospechar sobre la presencia de esta enfermedad, ya que si se diagnostica y se trata precozmente la recuperación es más fácil y rápida.


Criterios para diagnosticar Anorexia Nerviosa:

  • Restricción del aporte energético que lleva a un peso significativamente bajo, considerando edad, sexo, trayectoria evolutiva y salud física.
  • Miedo intenso a ganar peso o convertirse en obeso, o conducta persistente que interfiere en la ganancia de peso. (Se podría diagnosticar también sin cumplir este criterio)
  • Alteración de la percepción del peso y la silueta corporales, exageración de la importancia en la autoevaluación o negación del peligro que comporta el bajo peso corporal.

La Anorexia Nerviosa consta de 2 subtipos:

  • Restrictivo: en los últimos 3 meses no ha recurrido a atracones o purgas. El bajo peso se debe a restricción alimentaria o ejercicio en exceso
  • Compulsivo/purgativo: en los últimos 3 meses se ha recurrido a atracones o purgas

Si se da remisión de algún síntoma, especificar:

  • En remisión parcial: después de cumplir todos los criterios, deja de cumplirse el bajo peso, pero sí se mantiene el miedo a engordar y la alteración de la percepción del peso o silueta.
  • En remisión total: no cumple ningún criterio durante un período sostenido

Cabe destacar también que se suelen dar:

  • Otras alteraciones psicopatológicas: Suelen estar presentes síntomas como estado de ánimo depresivo, apatía, dificultad para concentrarse, ansiedad, irritabilidad, aislamiento social, pérdida de la libido, alteraciones del sueño, obsesiones y / o rituales obsesivos alrededor de la comida . Estas alteraciones tienen impacto directo en la vida diaria del enfermo, afectando en gran medida las relaciones que establece con la familia y los amigos.
  • Alteraciones físicas derivadas de una malnutrición grave: Descalcificación ósea, problemas cardiacos, sensación constante de frío, estreñimiento, caida de cabello, etc.


Bulimia Nerviosa

¿Qué es la Bulimia Nerviosa?

La Bulimia Nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza por episodios de atracones (ingesta voraz e incontrolada), en los que se ingiere una gran cantidad de alimento en poco espacio de tiempo y generalmente en secreto. Las personas afectadas intentan compensar los efectos de las sobreingesta mediante vómitos autoinducidos y / o otras maniobras de purga o aumento de la actividad física.


Muestran preocupación enfermiza por el peso y la figura, pero no se producen necesariamente alteraciones en el peso, ya que tanto pueden presentar peso normal, como bajo peso o sobrepeso. La bulimia nerviosa suele ser un trastorno oculto, fácilmente pasa desapercibido, y se vive con sentimientos de vergüenza y culpa. Por este motivo la persona afectada suele pedir ayuda cuando el problema ya está avanzado .La Bulimia Nerviosa afecta a entre el 0,4% y el 3% de la población joven española, especialmente a las chicas.

Criterios para diagnosticar Bulimia Nerviosa:

  • Presencia de atracones recurrentes. Un atracón se caracteriza por:
  1. Ingesta de alimento en un corto espacio de tiempo (por ejemplo, en un período de 2 horas) en una cantidad muy superior a la que la mayoría de las personas ingerirían en un período de tiempo similar y en las mismas circunstancias

  2. Sensación de pérdida de control sobre la ingesta del alimento (por ejemplo, sensación de no poder parar de comer o no poder controlar el tipo o la cantidad de comida que se está ingiriendo)

  • Conductas compensatorias inapropiadas, de manera repetida, con el fin de no ganar peso, como son provocación del vómito; uso excesivo de laxantes, diuréticos, enemas u otros fármacos; ayuno, y ejercicio excesivo.
  • Los atracones y las conductas compensatorias inapropiadas tienen lugar al menos una vez a la semana durante un periodo de 3 meses.
  • La autoevaluación está exageradamente influida por el peso y la silueta corporales.

En cuanto a los atracones cabe señalar que aunque el tipo de alimentos consumidos durante éste varía, en la mayoría de casos se ingieren dulces y alimentos con alto contenido en calorías. Los atracones se pueden presentar a cualquier hora del día, pero son más frecuentes a partir de media tarde y suelen desencadenarse por estados de humor alterados, dificultades interpersonales, hambre intensa o sentimientos relacionados con el peso, la figura corporal o los alimentos. Se acompañan de sensación de falta de control y pueden reducir el malestar de forma transitoria, pero siempre van seguidos de sentimientos de culpa, autodesprecio o humor depresivo.